Fue el 21 de enero de 1984 cuando un autobús que se dirigía hacia Coopevega, en el distrito de Cutris de San Carlos, se quedó sin frenos en el sector de Puente Casa de Florencia.
El fatal percance dejó 22 personas fallecidas y 97 heridos.
Aunque únicamente tenía capacidad para 70 pasajeros, más de 100 personas viajaban aquel fatídico día en El Betzabé hacia destinos como Florencia, Pocosol y Cutris, sin siquiera imaginar lo que estaba a poco de ocurrir luego de abordar la sobrecargada unidad en Ciudad Quesada.
Claudio Ríos, un popular curandero con medicina natural, fue uno de los que perdió la vida en este accidente. Ríos, incluso, tomó un taxi para alcanzar a la antigua unidad, a la cual logró subir en la parada del Hospital San Carlos.
Después de quedarse sin frenos, el autobús se salió de la carretera y cayó a un guindo de más de 50 metros de profundidad, donde sucedió lo peor.
La comunidad de Puente Casa organiza un oficio religioso para este fin de semana con dos propósitos: Por un lado, rememorar a las personas fallecidas y, por el otro, dar gracias por quienes sobrevivieron para narrar esta historia de dolor, que marcó a todo el cantón y permanece en la memoria colectiva de decenas de sancarleños.
La tragedia de Puente Casa llega a 39 años este sábado 21 de enero.