Una orden sanitaria del Ministerio de Salud dejó fuera de sus oficinas a las autoridades del Tránsito, en el cantón de Sarapiquí, desde el 28 de junio anterior, según confirmaron a La Región los encargados de la Delegación en este cantón herediano.
El edificio que ocupa dicha Delegación es propiedad del Instituto Nacional de Desarrollo Rural (INDER) y aunque está en trámite de donación, es una construcción vieja, que no cumple las condiciones mínimas para albergar a los trece funcionarios de esta policía, a los cuales el Ministerio de Salud les prohíbe la permanencia dentro de esas instalaciones.
Fernando Dondi, jefe de Tránsito en Sarapiquí, manifestó a este medio que la situación es difícil, ya que la orden sanitaria solo permite la permanencia de un funcionario en esas oficinas.
Dondi López acepta que el estado de esas instalaciones es lamentable y la única alternativa que se presenta es la demolición para construir una delegación nueva, ya que el mal estado de los servicios sanitarios, la presencia de murciélagos y en general, el deterioro de las instalaciones la hacen inhabitable.
Plantel saturado de vehículos detenidos
Si el problema de la orden sanitaria no es suficiente, la Delegación del Tránsito de Sarapiquí tiene totalmente saturado el espacio para carros y motocicletas, que han sido decomisados por sus oficiales en los últimos meses.
En total, en esa Delegación tienen 1,224 motocicletas y 120 vehículos que agravan la situación de esas autoridades.
La Delegación de la Policía de Tránsito de Sarapiquí atiende todo el cantón y parte de la ruta 32, lo que requiere de instalaciones y personal con las condiciones necesarias para sus funciones.