Dos periodistas del medio de investigación La Posta abandonaron el país de manera urgente, para garantizar su seguridad, luego de recibir amenazas de muerte, según denunció el propio medio de comunicación.
Andersson Boscán, cofundador de La Posta, y la periodista Mónica Velásquez huyeron ante “concretas y preocupantes amenazas a su seguridad personal y familiar” a razón de sus investigaciones, informó el diario en un comunicado.
“Esta dura decisión se ha tomado, tras una responsable evaluación de los hechos, la confrontación de distintas fuentes y la sugerencia de representantes de la seguridad internacionales”, acotó el comunicado.
La Posta denuncia el ambiente peligroso y hostil que atraviesa el periodismo ecuatoriano, “amenazado por el crimen organizado y por un Estado que se ha convertido en un peligro, más que en una garantía natural”.
Organismos defensores de la libertad de expresión y de prensa han reaccionado a los hechos; Fundamedios dijo que los periodistas amenazados “Dejaron Ecuador, con destino a un país seguro”.
La Posta asegura que las amenazas a su personal están relacionadas con el trabajo de investigación periodística que realiza, la publicación sobre las estructuras del crimen y de casos de corrupción en el país.
En marzo de esta año, la periodistas Karol Noroña, del medio GK, también debió abandonar Ecuador bajo amenazas de muerte.
La administración del presidente, Guillermo Lasso, enfrenta estos días una crisis de inseguridad que ha llevado a decretar el estado de excepción en varias regiones del país, luego del asesinato del popular alcalde de la ciudad de Manta, Agustín Intriago, y un nuevo motín carcelario, con decenas de fallecidos.
El gobierno ecuatoriano no se ha pronunciado aún sobre la salida forzada de los comunicadores mencionados, que señalan la corresponsabilidad del Estado en la falta de garantías para el libre ejercicio del periodismo.